¿Estamos dispuestos los usuarios a pagar por el uso de aplicaciones sociales?
La pregunta es un poco engañosa, ya que da por sentado algo que en realidad no es cierto. No es cierto que ahora el uso de aplicaciones sociales, como puedan ser las propias redes sociales o las aplicaciones móviles con componentes sociales no nos estén costando algo. No nos cuestan dinero en tanto a que no nos piden el número de Visa, pero estamos pagando de múltiples formas, bien sea a través de los anuncios que consumimos, o bien sea con el contenido e información que damos a cambio de su uso. Nada es gratis.
Ahora bien, en tanto en cuanto nos refiramos a sacar la tarjeta de la cartera, la pregunta haría referencia a si los usuarios están dispuestos a pagar dinero por su uso.
No nos faltan referentes. Uno de los últimos es la aplicación de móvil Whatsapp que empezará a cobrar a los usuarios de Android en modo de suscripción anual. Por no hablar de las diferentes redes sociales de pago que existen en la actualidad. Una de las más conocidas es app.net que se ha postulado como la alternativa sin anuncios ni spam a twitter.
El valor que nos dan este tipo de redes está claro. O bien nos permiten estar conectados con nuestros grupos de contactos o bien nos dan acceso a información y conocimiento. También está claro que la infraestructura que proporcionan tiene un coste que debe cubrirse. ¿Pero estamos dispuestos a pagar (sacando la tarjeta de la cartera) por algo que hasta ahora ha sido gratuito, por algo que no hemos “necesitado” durante estos últimos años? Si algún día, redes generalistas como facebook o twitter pasaran a ser de pago (de nuevo, adicional al coste que ya estamos pagando), ¿estaríamos dispuestos a pagar por ellas? ¿nos podríamos permitir no hacerlo?
Foto | David Lacarta