Cadenas de fast food, social media y transparencia
Constantemente las redes sociales nos están dando lecciones de transparencia. Cada día.
En esta ocasión me referiré a las cadenas de fast food. Algunos de los casos de crisis de reputación más sonados en referencia a empleados “jugando” con la comida:
Este tipo de sucesos deberían ser una oportunidad de mejora de procesos. No estoy hablando de hacer una guía de comportamiento en redes sociales, tal como hacen algunos medios de comunicación para los periodistas que trabajan para ellos. Estoy hablando de otra cosa. No sólo me importa que un empleado chupe mi comida y lo enseñe en internet, también que chupe mi comida a secas. Los social media han destapado seguramente lo que es una práctica (no diré que habitual, porque no es así) que seguramente lleva haciéndose en la misma proporción que ahora desde que se montó el primer puesto de fast food.
Lo que quiero decir es que bendito sea el social media, si hace destapar un problema en una empresa. No es una crisis de reputación que hay que solucionar (que también) sino que es todo un proceso de selección de personal (como mínimo) el que hay que volver a revisar. Problemas de funcionamiento internos que han sido hechos evidentes gracias a la crisis de reputación. Moraleja: las crisis de reputación son buenas, por lo general sirven (o deberían servir) para mejorar.